París 1942. Un hombre que trabaja en una joyería aspira formar una familia con la mujer que ama, Blanche. Pero la ocupación alemana lo altera todo.
El compositor firma una banda sonora dramática en la que enfatiza lo turbulento, lo oscuro y lo tenso, y en ese contexto desarrolla una música sentimental, afligida, que funciona por contraste y resalta el anhelo de libertad.