Una joven de un pequeño pueblo francés se enamora de un pintor, y será el comienzo de sus desdichas.
Para este filme y por la avanzada edad que tenía cuando le puso la música, Chaplin apenas empleó música original y recurrió a temas que había creado muchos años atrás y no utilizado. Es una banda sonora dramática, intensa en momentos, y también ligera y festiva, para lo ambiental.