A Nueva York llega un barco sin rumbo, y en su interior se alberga un zombie. La hija del dueño del barco viaja a una isla tropical intentando encontrar a su padre, pero la isla está plagada de muertos vivientes.
Singular partitura donde se exponen las sonoridades electrónicas habituales en estos filmes italianos, alternadas con ritmos étnicos de apariencia folklórica pero de resultados ciertamente angustiantes.