Un hombre vive esclavo de su silla de ruedas. Para evadirse, se inventa un mundo en el que una rubia le contrata como detective.
Convencional partitura de género, que el compositor desarrolla en dos niveles dramáticos: por un lado música sensual y cálida (con el inevitable saxo) y por otro temas para recrear un ambiente de misterio, que ejecuta con sintetizadores.