A principios del Siglo XX, durante los últimos días del Imperio Otomano, un estudiante de medicina y un prestigioso periodista americano se enamoran de la misma mujer en Armenia, lugar donde acontecerá un genocidio.
Banda sonora en la que el compositor parece querer reproducir -aunque no en su totalidad- el esquema narrativo que aplicó en la celebrada The English Patient (96), aunque con resultados desiguales. Todo se vertebra en derredor de un romanticismo lánguido y afectado, que se contextúa en un entorno de conflicto y violencia marcado por la música (e instrumentación) étnica, con variedad de temas de cierto voltaje dramático. Pero la falta de fortaleza del tema principal, que es algo grisáceo e indefinido, afecta al conjunto de esta creación, que acaba por ser débil en su estructura, en sus pretensiones y en sus resultados, viéndose afectada además por un cierto acaramelamiento del todo innecesario.