Comedia muda, sobre la intensa búsqueda que hacen unas personas que anhelan realizar una película de éxito y que van tras las estrellas de Hollywood, para convencerlas.
Enfática, delirante y, por momentos, apabullante banda sonora, que constituye una de las mejores creaciones en el género de la comedia. Parte de una poderosa marcha y prosigue con una amplia variedad melódica. El compositor dijo que: "El filme fue especialmente difícil porque, dado que en él no había diálogo, la música se convertía en el ritmo de la película. No había ningún ritmo verbal al que enfrentarse o al que subrayar, por lo que la música tenía que ser cuidadosamente elegida. Pienso que mi única regla era que no quería escuchar ni una sola nota del inevitable plano del cine mudo. No quería caer en esa trampa y, por lo tanto, sólo hay una gran orquesta en multitud de combinaciones".
Pero además, y en ello reside su principal virtud, todos los temas están perfectamente ubicados, y el compositor maneja con perfección el sentido del "sonido del silencio", no reiterando con música aquellos pasajes que no requieren de subrayado sonoro.