Esta semana alcanzamos otro hito en nuestros casi 20 años de Historia: hemos restaurado íntegramente la banda sonora de Harry Gregson-Williams para el filme de Ridley Scott Kingdom of Heaven (05), que fue masacrada en su montaje final. Tras la monumental restauración de Troy nuestro compañero Ignacio Marqués Cuadra ha vuelto a dar lo mejor de sí mismo para que pueda conocerse la película que debió ser y que no pudo ser. Y ahora, con la música puesta donde nunca debió dejar de estar, se eleva realmente a los cielos: es inexplicable que se hiciera tamaño estropicio.
Decía Korngold que la inmortalidad del compositor se pierde en el camino que va de la sala de grabación a la de montaje, y aunque él se refería a la competición sonora con diálogos y sonidos la cita es aquí oportuna porque fue en la sala de montaje donde se destrozó la casi inmortal música de Gregson-Williams: se cambiaron pistas de música original por temas musicales de diversas películas y diferentes compositores (una ruptura aberrante de la unidad de criterio estilístico), recolocando arbitrariamente pistas de la música original en el metraje, -anulando con ello cualquier posibilidad narrativa- e incluso reemplazando la música de lugares capitales por versiones alternativas de temas menores e inconexos, dando lugar así a una banda sonora completamente mutilada y destrozada, tanto en la versión cinematográfica que se estrenó como en el montaje del director.
La reconstrucción se ha hecho tras un minucioso, exhaustivo y muy cuidado trabajo a partir de las sesiones de grabación disponibles, y buscando adecuarse a la lógica narrativa de la música. Ignacio ha contado nuevamente con la inestimable ayuda de Isaac Duro (diseño gráfico, pantallas y la realización del magnífico trailer que aquí presentamos) y de Mario Pons en la parte musical. A este se ha unido Manuel Báez, recién llegado a esta web y del que hemos publicado ya algunos artículos interesantísimos.
Explica Ignacio (arquitecto de profesión y arqueólogo de pasión) que:
"Se ha reconstruido estando muy seguros de que prácticamente toda la música estaba originalmente donde la hemos colocado porque fue compuesta para esas escenas. La mayoría de los cortes entran y funcionan perfectamente sin necesidad de remontar las escenas, como debimos hacer con Troy. Es simplemente como si Ridley Scott los hubiera arrancado de la película y hubiera hecho un Frankenstein con otras músicas, sin cambiar prácticamente el montaje, por lo que estamos muchísimos más seguros que con Troy que la música habría estado donde la hemos puesto. Asimismo muchos cortes sí estaban bien puestos y los hemos mantenido, no como con Troy, que hubo que montar el 100% de la música. Digamos que aquí nos hemos encontrado una ruina mejor conservada a la que le habían añadido unos pastiches de otras épocas, y lo que hemos hecho ha sido eliminar esos pastiches y restaurar las partes que se habían perdido"
Es importante subrayar que no hay pretensión comercial alguna en este proyecto ni la voluntad de perjudicar derechos de propiedad ajenos. Como creador y webmaster de MundoBSO tengo que decir que yo no he tomado parte en absolutamente nada de este ambicioso proyecto, y por tanto todos los honores recaen sobre Ignacio especialmente y sobre Mario, Isaac y Manuel. No puedo sino expresar mi admiración, reconocimiento y enorme orgullo por tenerlos a bordo de este Trasantlántico. Ignacio Marqués ha llegado a un nivel espectacular de conocimiento, entendimiento y sensibilidad sobre la música de cine como herramienta dramatúrgica y narrativa, y de eso sacamos buen provecho en la web, se beneficia la afición y se podrá demostrar nuevamente en cuanto lancemos esta versión restaurada y por fin elevada a los cielos.
Este es el trailer, creado por Isaac Duro: